En Pakistán, el temor crece entre las comunidades afganas refugiadas, ante la intensificación de las deportaciones forzadas hacia Afganistán. Desde el 1 de abril, las autoridades pakistaníes han acelerado estas expulsiones, en el marco de una campaña iniciada en octubre de 2023 bajo el argumento de reforzar la seguridad nacional tras el aumento de atentados terroristas.

Pakistán ha acogido a unos 2,8 millones de afganos durante las últimas tres décadas, incluidos más de 600.000 que llegaron tras la toma del poder por los talibanes en Kabul el 15 de agosto de 2021. Sin embargo, ahora incluso personas registradas ante el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) o con solicitudes de asilo pendientes en embajadas extranjeras han sido deportadas, junto con quienes se encontraban en situación irregular.

Las redadas policiales son frecuentes en barrios con alta concentración de población afgana, generando un clima de miedo e inestabilidad. Muchas familias viven escondidas, incluso aquellas con visados aún vigentes, por temor a que las autoridades ya no los reconozcan como válidos para evitar la expulsión.

Por admin

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Traducir»