Los 15 gremios que integran la Coalición por la Seguridad Ciudadana se reunieron en la Cámara de Comercio de Lima para exigir al Ejecutivo y al Congreso acciones concretas y con resultados medibles frente al avance de la criminalidad.
Empresarios de distintos rubros denunciaron que la inseguridad afecta gravemente a farmacias, panaderías, bodegas, comedores populares, ferreterías, barberías, salones de belleza, transporte y otros negocios en todo el país.
Sectores más afectados
Farmacias y boticas: Ana María Jiménez, presidenta de la Asociación Peruana de Farmacias, informó que más de 5,000 locales han recibido amenazas, cerrado o migrado del país. Quienes se negaron a pagar extorsiones fueron víctimas de violencia.
Panaderías: En Trujillo, más del 40% de panaderías son extorsionadas, según Pío Pantoja, presidente de la Asociación de Panificadores.
Bodegas: Andrés Choy, presidente de la Asociación de Bodegueros del Perú, señaló que más de 5,000 locales están bajo extorsión y al menos 1,000 cerraron definitivamente. Muchos deben pagar doble cupo e invertir en costosas medidas de seguridad, como rejas y placas de acero.
Comedores populares: Rosa Castillo, presidenta de la Asociación Coordinadora Nacional de Madres y Comedores Populares, advirtió que los ataques también golpean a las familias de los trabajadores, afectando la educación de los niños y perpetuando la pobreza.
Belleza y barberías: Rebeca Antezana, presidenta de la Asociación Peruana de Empresas de Belleza, recordó que a inicios de año fueron asesinados cuatro barberos y peluqueros. La mayoría de negocios en Lima Norte y Lima Sur paga extorsiones para poder seguir operando.
Ferreterías: Carlos Tarazona, presidente de la Asociación Ferretera del Perú, indicó que 350 ferreterías han cerrado en distintas regiones.