El alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, anunció que antes de la quincena de julio llegarán al puerto del Callao los 45 vagones y 10 locomotoras que conformarán el nuevo tren Lima–Chosica. Según indicó, la primera embarcación proveniente de Estados Unidos arribaría el 12 de julio. “Mi ilusión es que el 28 de julio, como regalo a Lima, ya tengamos una marcha blanca”, declaró.
No obstante, desde el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), el ministro César Sandoval aclaró que aún faltan trámites y autorizaciones técnicas fundamentales para poner en marcha el proyecto. Esta discrepancia entre ambas autoridades evidencia la incertidumbre sobre el inicio real de operaciones del tren.
En su primera etapa, el tren cubrirá siete estaciones entre Desamparados y Chosica, y reducirá el tiempo de viaje a solo 25 minutos. Vecinos de distritos como Chaclacayo, Ate y Chosica expresaron su entusiasmo. “Ahora demoro hasta tres horas. Antes, cuando había tren, era más fácil”, recordó una vecina de Carapongo, aludiendo al antiguo servicio ferroviario.
Retos técnicos pendientes
El sistema proyecta transportar a más de 250 mil personas por día. Para su segunda etapa se prevé la implementación de una doble vía, lo que implicaría expropiaciones, ya que muchas viviendas se ubican junto a la línea férrea. Además, si los vagones superan la altura del puente Los Ángeles, se tendría que modificar el nivel de los rieles, según advirtió el alcalde de Chosica, Oswaldo Vargas.