Kim Yong Nam, exjefe de Estado nominal de Corea del Norte y uno de los diplomáticos más veteranos del régimen, falleció a los 97 años por un fallo multiorgánico, informó la agencia estatal KCNA.
Entre 1998 y 2019, Kim encabezó el Presídium de la Asamblea Popular Suprema, desempeñando el papel de jefe de Estado ceremonial bajo los gobiernos de Kim Jong-il y Kim Jong-un. Su longevidad política, inusual en un sistema marcado por purgas, se atribuye a su lealtad inquebrantable hacia la dinastía Kim.
El líder norcoreano Kim Jong-un acudió personalmente a rendirle homenaje, según imágenes difundidas por la televisión estatal.
“Pese a ocupar un cargo en gran parte simbólico, Kim Yong Nam tuvo una notable influencia en la diplomacia norcoreana y fue un enlace clave con la élite del servicio exterior”, señaló Michael Madden, experto del Stimson Center.
En 2018 encabezó la delegación norcoreana en los Juegos Olímpicos de Pyeongchang, aunque cedió el protagonismo a Kim Yo Jong, hermana del actual líder, en un gesto interpretado como señal de respeto al poder familiar.
El ministro surcoreano de Unificación, Chung Dong-young, expresó sus condolencias y recordó que Kim Yong Nam “ayudó a abrir la puerta al diálogo intercoreano”.
China también lamentó su fallecimiento, destacando su papel en el fortalecimiento de las relaciones entre Pekín y Pyongyang.
Con AFP y Reuters.